Modelos de gestión de la convivencia

Día a día, nos enfrentamos cada  vez más a conflictos en las aulas de los centros educativos. El acoso escolar es uno de los temas más comunes, donde no sólo se enfrentan alumnos con alumnos, sino también hay casos de alumnos con profesores, pero…¿cómo resolver dichos conflictos?

Existen tres modelos de resolución de conflictos. Comenzaré a hablar de un modelo, el primero de todos ya que es el más antiguo, el tradicional, el modelo punitivo. Éste modelo se basa en el castigo, ya que intenta resolver los conflictos mediante un castigo al agresor. Dicho modelo no busca soluciones al conflicto, ni intenta que los implicados se reconcilien. De hecho no corrigen la conducta del agresor, ni ayuda a la víctima ya que ésta puede seguir teniendo miedo al agresor.

Creo que este modelo no es el más adecuado a causa los inconvenientes dichos anteriormente, pero por desgracia pienso que es el modelo más usado en la mayoría de los centros porque es la forma más rápida y sencilla de resolver el conflicto desde el punto de vista del castigador.

En clase vimos un vídeo acerca de un instituto de Galicia, O Pelouro, donde una profesora responde de forma muy distinta al modelo explicando anteriormente ante los conflictos que ocurren en su aula. Ella utiliza los otros dos modelos de resolución de conflictos, que se basa en el diálogo y la búsqueda de mejores soluciones al problema.

Uno de ellos es el modelo relacional que se basa principalmente en el diálogo voluntario de los implicados. No se obliga a solucionar el conflicto si no se quiere. El colegio actúa de forma activa ante el conflicto. El último modelo, el integrado, es parecido al anterior, ya que también se basa en el diálogo. El centro intenta ayudar mediante un equipo de mediación que intenta favorecer a los implicados buscando soluciones y la llegada a un acuerdo.

Creo que deberíamos de olvidar del modelo punitivo, y deberíamos optar por utilizar los otros dos modelos, en cuanto mi opinión, más exactamente el modelo integrado pues pienso que es el mejor modelo para utilizar ante un conflicto. El diálogo es fundamental para resolver un problema, y en algunos casos se necesita un mediador, que ayude a llevar a cabo una solución y un acuerdo entre los implicados, favoreciéndolos a todos.